Thursday, April 30, 2009

Sobre las huellas



"Algunos atómos y moléculas están unidos por una débil fuerza atrayente entre ellos, llamado enlace de Van der Waals. Esta forma de enlace es muy, muy débil, apenas existente, corriéndose el riesgo de que los minerales así constituidos se deshagan en cuanto se ejerce sobre ellos cualquier fuerza.
Los átomos de carbono del mineral de grafito están enlazados en forma de láminas, pero las láminas se mantiene unidas débilmente mediante enlaces de van der Waals. Este tipo de enlace hace que el grafito sea útil para las minas de los lápices; cuando movemos un lápiz por un trozo de papel, se desprenden pequeños trozos de grafito unidos por los enlaces y se adhieren al papel "
(Geología. Dinámica y Evolución de la Tierra)

Alguien me decía hace poco que quizás estemos todos un poco unidos por este tipo de enlaces, de forma que según nos rozamos, se nos desprenden trocitos de nosotros mismos....

Tuesday, April 21, 2009

Sobre el saber y las "almitas"

La sabiduría se encuentra ,muchas veces, lejos de los libros, de las Universidades y de los grandes centros de investigación y filosofía. Me refiero a ese saber que va más allá de lo intelectual, de lo cultural, a una manera de enfrentarse a la vida. Ese saber se encuentra a menudo en los lugares más insólitos.
Gracias a Eva, que me dio paso a esta nueva etapa de mi vida, yo he aprendido grandes lecciones que me he prometido a mi misma no olvidar nunca.
Ahora, que se acaba también este periodo, no podia dejar pasar la ocasión de hacer un homenaje gráfico y escrito a las personas que han compartido tantas y tantas horas conmigo en esa oscura cueva que es el Nouvel 0, y que se ha convertido, de manera completamente providencial, en mi particular Asclepeion.
Estos han sido mis grandes maestros que, durante un mes y medio, me han impartido un master de humildad, optimismo y convivencia:
Gracias a esa maravillosa gran mujer que es MºJosé, por su apoyo, su creatividad para afrontar los grandes asuntos de la vida, su capacidad para escuchar y sus grandes lecciones de como "hacer el paripé" con los invitados franceses....
A Mauro, por su gran personalidad y su disposición.A mi dulce segunda mamá, Pilar, por sus grandes consejos, su gusto por las joyas exóticas, por la suerte turca que llevo siempre conmigo y por ese " Nena, pisa fuerte, que paga el Ayuntamiento". A Gregorio por su ternura, sus siempre magníficas recomendaciones literarias, y por esas intensas y productivas conversaciones sobre budismo, Marx o Jung. Has sido para mi un gran descubrimiento.
A Máximo, por su profesionalidad y esa manera con la que no le sale sonreir.

A nuestro gran Matias Mc. Giver, por su permanente disponibilidad y buen humor.
Al bueno de Luis, todo corazón, por su naturalidad.
A esa fuerte y digna mujer que es Laura, por su pasión por la novela histórica y sus lecciones sobre la esclavitud congoleña.
A la dulzura y el saber estar de Isabel.

A Fabián, por su gracia andaluza.

A Eugenia, por su capacidad para disfrutar de las cosas pequeñas.
A Edu, por su gran sentido del humor y su cercanía.A Noelia, por su pasión y su espontaneidad.
A Almudena, por su capacidad de ponersecada día el mundo por montera.A Socorro, por su fuerza y su simpatía. Y a mis dos grandes mediadoras:
A la fuerte y coherente Teodora, por su apoyo y su sinceridad. Por considerarme valiente.
Y a Ana, por su dulzura gallega, por tantas horas de Katarsis y por sus consejos que me han enseñado "la cantidad de almitas que hay por el mundo, reina".

Ps. Gracias también a Rosa, a la gran presencia ausente de Mercedes, la hija de circenses que con su pelo rojo, sus historias sobre el Bar de Leganés y su sonrisa ha cambiado mi manera de ver el mundo.
Y por supuesto a Eulalia Valldosera, porque me ha reencontrado con el Arte Contemporáneo y su capacidad para conmover.

A todos, simplemente, HA SIDO UN PLACER.

Thursday, April 16, 2009

Sobre la regeneración

Kallan, the angel of the stupas. Leh, Ladakh ( India) 2008.

"Que hoy more la paz en ti. Que sepas y confíes en que estás exactamente en el lugar en el que debes estar. Que no puedas olvidar las posibilidades infinitas que surgen a través de la fe en tí misma y en otros. Que puedas utilizar los dones que has recibido, y puedas pasarle a otros el amor que has recibido. Que puedas estar contenta por la persona que eres, tal como eres, ahora mismo. Permite que este conocimiento penetre hasta tus huesos, y permítele a tu alma la libertad de cantar, bailar, alabar y amar. Todo ello está ahí para cada una y todas nosotras".

Santa Teresa
Pd: Gracias a Nico y a Rocío, por tanta sabiduría, como siempre....

Sunday, April 05, 2009

EL MENSAJE


Hubo una vez un rey que dijo a los sabios de la corte:

- Me estoy fabricando un precioso anillo. He conseguido el diamante más bello. Quiero guardar oculto dentro del anillo el mensaje más sabio, un mensaje que pueda ayudarme en los momentos más dificiles; que ayude a mis herederos, y a los herederos de mis herederos, para siempre. Tiene que ser un mensaje pequeño, de manera que quepa debajo del diamante del anillo.

Todos los grandes eruditos que le escuchaban podrían haber escrito grandes tratados, pero darle un mensaje de no más de dos o tres palabras que le pudieran ayudar en momentos de desesperación total se torno una tarea muy complicada... Pensaron, buscaron en sus libros, pero no encontraron nada que ofrecerle.

El rey tenía un anciano sirviente que también había sido sirviente de su padre. La madre del rey murió pronto y este sirviente cuidó de él, por tanto, lo trataba como si fuera de la familia. El rey sentía un inmenso respeto por el anciano, de modo que también lo consultó.

El anciano respondió:

-No soy un sabio, ni un erudito, ni un académico, pero conozco el mensaje que requieres. Durante mi larga vida en palacio, he tratado con todo tipo de personas.
En una ocasión tuve la oportunidad de conocer a un místico. Era invitado de tu padre y yo estuve un tiempo a su servicio. Cuando se iba, como gesto de agradecimiento, me dio este mensaje –el anciano lo escribió en un diminuto papel, lo dobló y se lo dio al rey-.

No lo leas –le dijo- manténlo escondido en el anillo. Abrelo sólo cuando todo lo demás haya fracasado, cuando no encuentres salida a la situación-

Ese momento no tardó en llegar. El país fue invadido y el rey perdió el reino. Estaba huyendo en su caballo para salvar la vida y sus enemigos lo perseguían. Estaba solo y los perseguidores eran numerosos. Llegó a un lugar donde el camino se acababa, no había salida: enfrente había un precipicio y un profundo valle; caer por él sería el fin. Y no podía volver porque el enemigo le cerraba el camino. Ya podía escuchar el trotar de los caballos. No podía seguir hacia delante y no había ningún otro camino...

De repente, se acordó del anillo. Lo abrió, sacó el papel y allí encontró el mensaje.
Simplemente decía: “ESTO TAMBIEN PASARA”.

Sintió que se cernía sobre él un gran silencio. Los enemigos que le perseguían debían haberse perdido en el bosque, o debían haberse equivocado de camino, pero lo cierto es que poco a poco dejó de escuchar el trote de los caballos.

El rey se sentía profundamente agradecido al sirviente y al místico desconocido. Aquellas palabras habían resultado milagrosas. Dobló el papel, volvió a ponerlo en el anillo, reunió a sus ejércitos y reconquistó el reino. Y el día que entraba de nuevo victorioso en la capital hubo una gran celebración con música, bailes... y él se sentía muy orgulloso de sí mismo. El anciano, que estaba a su lado en el carro, le dijo:

-Este momento también es adecuado: vuelve a mirar el mensaje.

-¿Qué quieres decir? –preguntó el rey-. Ahora estoy victorioso, la gente celebra mi vuelta, no estoy desesperado.

-Escucha –dijo el anciano-: este mensaje no es sólo para situaciones desesperadas. No es sólo para cuando estás derrotado; también es para cuando te sientes victorioso. No es sólo para cuando eres el último; también es para cuando eres el primero.


El rey abrió el anillo y leyó el mensaje:
“ESTO TAMBIEN PASARA”.

Y nuevamente sintió la misma paz. En medio de la muchedumbre que celebraba y bailaba, el ego había desaparecido. El rey pudo terminar de comprender el mensaje. Se había iluminado.

Entonces el anciano le dijo:

-Recuerda que todo pasa. Nada es permanente. Como el día y la noche, la vida está llena de alegría y de dolor. Acéptalos como parte de la dualidad de la naturaleza porque son la naturaleza misma de las cosas.