Friday, May 22, 2009

Sobre el miedo (parte I)



"Cuando tenía unos diez años, mi mejor amiga empezó a tener pesadillas: iba corriendo en medio de un gran edificio oscuro perseguida por horribles monstruos. Llegaba a una puerta, luchaba por abrirla y en cuento la cerraba tras de sí oía que era abierta por los monstruos que volvían a pisarle los talones. Se despertaba llorando y pidiendo ayuda. Un día estábamos sentadas en su cocina hablando de sus pesadillas. Cuando le pregunté que aspecto tenían sus demonios me dijo que no lo sabía porque siempre había huido de ellos. Después de que le hiciera mi pregunta, mi amiga comenzó a plantearse preguntas sobre los monstruos. Se preguntaba si tendrían aspecto de brujas y si alguno de ellos llevaría un cuchillo. La próxima vez que tuvo la pesadilla, cuando los monstruos estaban empezando a perseguirla, se paró y se dio la vuelta. Necesitó un coraje enorme, su corazón latía tan fuerte que parecía que se le iba a salir del pecho, pero apoyó la espalda contra la pared y los miró de frente. Todos se detuvieron justo delante de ella y empezaron a dar saltos arriba y abajo, pero ninguno se acercó más. Eran cinco en total, y cada uno se parecía a un animal. Uno era un osos gris que el lugar de zarpas de osos tenía unas largas uñas rojas, otro tenía cuatro ojos y el tercero tenía una herida en la mejilla. Mirados de frente tenían un aspecto menos monstruoso y se parecían mas a dibujos de dos dimensiones, de esos que aparecen en los libros de comics. A continuación, poco a poco comenzaron a desvanecerse. Después, mi amiga se despertó. Ese fue el fin de sus pesadillas".
Pema Chödrön.

Sunday, May 10, 2009

Sobre cómo despedirse con un "hasta luego".

La vida sigue cerrando etapas y abriendo otras. Estas dos grandes mujeres, que han crecido un poquito estos meses conmigo y me han hecho crecer “vuelan del nido” para construir a partir de ahora, ellas solas, su propio camino. Y no podia dejar pasar la ocasión para mostrar su verdadera belleza.


Gracias a Kimberly por ser la valiente y pequeña heroína viajera que compartió conmigo camilla en el salón de piercing y que ahora ya sabrá lo que es saltar en paracaidas...



Y para mi gran maestra de la vida, Paula, simplemente...no tengo palabras. Hacía mucho tiempo que no conocía a alguien con una comprensión del mundo tan global, natural y positiva. Eres tan preciosa por dentro como por fuera.
Puede que aquella noche de chocolate, Martini y confidencias que pasamos en mi oscuro salón, cambiara totalmente mi actitud ante esta nueva vida que he comenzado...


Gracias por tu "Camino de Santiago", que abrió una enorme ventana en mis relaciones familiares, por tu capacidad de adaptación y de trabajo, por tu buen humor, por el "smokin´& trippin'" de los Elastic por las mañanas, por los "lunes de aguas", por tus grandes y sabios consejos y por tu exquisito "olfato" para las colonias masculinas...
Me gusta mucho mas el mundo desde que lo veo a través de tus ojos.
No necesito desearte suerte, porque la llevas contigo y porque para mi ha sido una suerte formar parte de esta etapa de tu vida. Gracias de verdad.
Cuando sea becaria, quiero ser como tú....
Hasta luego.