Thursday, August 31, 2006


SONRISAS DE CHOCOLATE
Recreo un breve paseo por Selçuk. Estas son sus gentes. Viven y trabajan en la calle, miran, pasean, conversan en la calle,siempre al aire libre. La casa es solo un lugar para dormir. No nacimos para estar encerrados.
Las recias mujeres curtidas por el tiempo, sentadas siempre en la puerta de sus casas, saludan a mi paso.

Las adolescentes que cuchichean sentadas en las aceras. Cuando les hago fotos puedo sentir su poder y su fragilidad cual "virgenes suicidas". se exhiben pudorosas y desafiantes a la vez.

Los hombres que cuidan y decoran sus pequeños negocios con primor, como este pescadero del mercado, enmarcado por una enorme aleta de tiburón que ha colgado orgulloso de su estabecimiento. Ellos siempre están algo aburridos, deseosos de corversación o de echarse un baggamon con el primero que pase.

Y los niños, esperando a la vuelta de la esquina con una serpiente de mentirijillas para asustar a la gente o mostrando amplias sonrisas... de chocolate.

Todos ellos son increibles. Este es el primer lugar en el que he estado donde la gente me da las gracias por hacerle una foto y no al revés. Para ellos posar para mi es un privilegio, les hace sentirse especiales... No saben que siempre lo han sido.

3 comments:

Anonymous said...

Cuando voy de vacaciones le pido a la gente que me haga fotos, nunca se me había ocurrido hacerles fotos a las personas.
La próxima vez que vaya de vacaciones intentaré ser fotografa y no modelo y tratar de ver la belleza de las personas y no solo de los monumentos.
Muchas gracias por hacerme ver otra forma de entender las vacaciones
Un beso
AB

Sofía de Juan said...

Creo que lo que pasa es que muchas veces yo necesito una cámara para fijarme mejor en las personas y grabarlas en mi memoria es mi manera de aprehenderlas, captar su esencia y aprender lo mejor de cada una. Pero hacerte fotos a ti misma en situaciones especiales es estupendo.Hacerte fotos delante de un lugar maraviloso no es sino dar testimonio del milagro del mundo,de que estuviste alli.De que eras feliz y estabas maravillada con lo que vivias. Puede que esas cosas sean las que te hacen mejor persona. porque tu retratas tu experiencia que es lo que te importa. Aprendes de ella. y la transmites.quizá mejor que hacer fotos a las personas sería que te hicieras fotos con las personas a partir de ahora, y no solo con los monumentos, pero no dejes de hacerte fotos, es tu manera de recordarte a ti misma el milagro de tu vida. y además tu tienes la virtud de captar lo mejor de las personas sin necesidad de una cámara.

Aitana Luis said...

Gracias sofía por este testimonio. Se me han erizado los pelos con cada foto y cada palabra tuya. He podido ver los colores, sentir los olores y conocer gente que està a tantìsimos kilòmetros y que sin embargo se sienten tan cerca.
Sin duda es un viaje que habrà que planear sin perder tiempo.
Un abrazo.
Aitana.